En abril, mayo y junio, los candidatos libertarios competirán con seis gobernadores y el jefe de gobierno porteño, que provincializaron los comicios para preservar su poder; la mayoría de ellos evita confrontar con la Casa Rosada
Mientras intenta dejar atrás traspiés políticos recientes, como el escándalo de las cripto que involucra al propio Presidente, el revés en la Corte Suprema por la designación de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla por decreto y el rechazo judicial a la conversión del Banco Nación en una sociedad anónima, el Gobierno mira con optimismo y, luego de la suspensión de las PASO, apunta sus principales cañones a las elecciones legislativas nacionales de medio término. Según la mirada oficial, los comicios le permitirán reforzar la presencia en el Congreso para los segundos dos años de gestión libertaria.
Pero el camino electoral hasta octubre se presenta pedregoso y con obstáculos. Hay, hasta el momento, siete elecciones provinciales confirmadas, en las que los candidatos libertarios enfrentarán un desafío mayúsculo: intentar hacer pie sin -por el momento-nombres rutilantes a la cabeza de sus listas, ni un armado provincial potente que ratifique en las urnas el apoyo que las encuestas muestran hacia la gestión del gobierno de La Libertad Avanza (LLA).
“En la mayoría de los lugares partimos de cero, tenemos todo para ganar”, dice un alto referente libertario mirando la mitad del vaso electoral lleno. “Vamos a jugar con la marca Milei en todos lados, pero lo que más nos importa es la nacional de octubre. No vamos a arriesgar ninguna carta fuerte en las provinciales”, razona la espada libertaria.
La primera cita se dará en Santa Fe, dónde el 13 de abril se llevará adelante la elección de 69 convencionales constituyentes para reformar la Carta Magna provincial, que data de principios de los años 60 y que prohíbe (al igual que la de Mendoza) la reelección del gobernador.
El diputado nacional Nicolás Mayoraz, que será candidato, y Romina Diez, cercana a Karina Milei, que tiene a su cargo el armado nacional de La Libertad Avanza, son las cabezas de la “patriada” libertaria, en un contexto a priori, muy adverso. Es que el propio gobernador radical Maximiliano Pullaro será el primer nombre en la lista oficialista, con serias chances de triunfo y encuestas muy favorables. De vínculo “institucional” con el Gobierno, Pullaro cuenta con una ventaja adicional: la división del voto libertario, ya que la ex periodista y diputada provincial Amalia Granata no llegó a un acuerdo para unir fuerzas con LLA e irá por separado.
Si imponer la “marca Milei” en Santa Fe parece difícil, no será menos complicado para el Gobierno poder sumar bancas en el “superdomingo” del 11 de mayo, cuando Chaco, San Luis, Salta y Jujuy renueven sus legislaturas provinciales.
En Chaco y Jujuy, los gobernadores radicales Leandro Zdero y Carlos Sadir se enfrentarán ese día a un peronismo disminuido y a los libertarios en proceso de formación. Con el exgobernador peronista Jorge Capitanich coqueteando con una doble candidatura (a diputado provincial en mayo, a senador en octubre), los libertarios se dividen entre el referente Alfredo “Capi” Rodríguez y el diputado nacional Carlos García, enfrentados entre sí con acusaciones mutuas de corrupción. “El mandato de Karina Milei es que La Libertad Avanza tenga su construcción propia, su músculo político, y llegado el caso nos presentemos con nombre y apellido en las distintas elecciones”, dijo Rodríguez, días atrás, según el diario Norte.
La división interna, que Karina Milei y sus operadores intentan acallar, es clara: mientras Rodríguez, con un guiño de la Casa Rosada, explora por lo bajo una alianza de última hora con el gobierno provincial, García se muestra con referentes chaqueños de Pro, de Mauricio Macri.
En Jujuy, el gobernador Sadir cultiva el bajo perfil y una continuidad política con su antecesor, Gerardo Morales. De buen vínculo con la Casa Rosada (forma parte del grupo de productores de litio con sus pares de Catamarca y Salta), y con los nombres de sus candidatos aún por definir, Sadir enfrentará a un peronismo intervenido (el exministro kirchnerista Aníbal Fernández es el actual interventor), y a La Libertad Avanza, cuyos referentes son el jefe del bloque libertario en el Senado, Ezequiel Atauche, y el diputado nacional Manuel Quintar, con pasado en el PJ. Sin diputados provinciales y con la personería provincial aún pendiente, el espacio libertario espera ganar algunas de las bancas en juego, siempre con la buena imagen de Milei en Jujuy como principal bandera.
El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, intentará en la cita electoral consolidar su poder en las elecciones legislativas, que al igual que varios de sus colegas gobernadores alejó todo lo que pudo de las elecciones nacionales. El Gobierno y la secretaria general de la Presidencia, confía allí en sus “pesos pesados”, el diputado del Parlasur Alfredo Olmedo y la diputada Emilia Orozco, aunque ambos se “guardarían” para la elección de senadores y diputados nacionales, en octubre.
En San Luis, y luego de terminar (al menos por el momento) con la dinastía de los hermanos Rodríguez Saá, el gobernador Claudio Poggi también pretende un triunfo claro el 11 de mayo, que aumente su poder en la legislatura local. Con su flamante frente Ahora San Luis, el mandatario apuesta a confrontar con su antecesor, Alberto Rodríguez Saá, y preservar su buen vínculo con Milei, representado en la provincia por el senador Bartolomé Abdala y el diputado Carlos D´Alessandro.
“Nuestro rival es Rodríguez Saá”, puntualizan cerca del gobernador, mientras los libertarios intentan, contrarreloj, poner los papeles en orden en la justicia provincial para obtener la autorización para competir.
La sexta, y tal vez la más trascendente de las citas electorales confirmadas, es la del 18 de mayo en la ciudad de Buenos Aires. Allí, los libertarios intentarán-aquí si, con el apoyo directo del Presidente- comenzar a pavimentar el camino para gobernar la ciudad en 2027. “Acá no hay acuerdo con el macrismo posible”, afirman desde LLA en territorio porteño, dónde también las figuras más taquilleras (Patricia Bullrich y Manuel Adorni) serían reservadas para la elección de octubre.
Los libertarios ven con alegría la aparición, en los últimos días, de distintas ofertas, como la de Horacio Rodríguez Larreta, Martín Lousteau y la CC-ARI de Elisa Carrió. “Todas le comen votos a Jorge Macri”, afirman en relación al jefe de gobierno porteño y dirigente de Pro, que, por su parte, intentará derrotar a los libertarios y defender su bastión histórico, en una elección en la que se pondrán en juego treinta bancas en la Legislatura y que sí tendrá resonancia a nivel nacional.
Misiones se sumó a la lista de provincias que separarán los tantos entre lo provincial y lo nacional. El gobernador Hugo Passalacqua fijó los comicios provinciales para el 8 de junio, más de cuatro meses antes de las legislativas nacionales del 26 de octubre. Nadie duda de que el oficialismo se impondrá nuevamente, ya que el Frente Renovador para la Concordia, que lidera sin discusión posible el caudillo Carlos Rovira, no tiene rivales serios a la vista.
Con el abogado Adrián Nuñez como referente provincial, y esperanzas módicas de sumar algún legislador, La Libertad Avanza apuntará sus principales cañones a la legislativa nacional, dónde se menciona al subsecretario de Prensa, Javier Lanari, y el “radical peluca” Martín Arjol como eventuales candidatos del Gobierno.