El ministro de Defensa, Luis Petri, salió a defenderse tras recibir críticas por su polémica decisión de autorizar a militares a detener civiles que hayan cometido delitos de flagrancia y negó que viole la Ley de Seguridad Interior.

«Lo han podido hacer siempre. Hay una confusión. La aprehensión en flagrancia la puede hacer cualquier persona, según el artículo 183 del Código Procesal Penal. No hace falta ser agente de seguridad», comenzó señalando el dirigente de origen radical.

En una entrevista con Radio Rivadavia, el funcionario fue consultado sobre si eso contradice la Ley de Seguridad Interior, a lo que respondió: «No, las Fuerzas Armadas estarán en zonas inhóspitas, no en lugares poblados ni en pasos fronterizos habilitados».

«El kirchnerismo envió a las Fuerzas Armadas a la frontera durante el Operativo Escudo Norte (2011-2016), pero sin darles facultades. Nosotros las estamos capacitando y equipando», agregó.

Sobre las críticas que recibió de su antecesor en el cargo durante el gobierno de Alberto Fernández, Agustín Rossi, Petri sostuvo que le «sorprende» que «alguien que fue ministro de Defensa no conozca la ley».

«Nosotros no violamos la Ley de Seguridad Interior. Además, se trata de defender la soberanía y actuar ante delincuentes», completó.

A su vez, Petri insistió en que se está «capacitando específicamente a las Fuerzas Armadas en tareas de control de fronteras». «Además, ya lo hacen en misiones como Chipre. Todos los países limítrofes usan a sus fuerzas en frontera», remarcó.