Giuliano Rossi, presidente de InVyTAM, destacó en diálogo con Mónica Saavedra y Daniel Ponce para 96.5 FM Cadena Entrerriana, el proyecto de módulos habitacionales de emergencia, trabajo que se inició hace tres meses con la firma del acuerdo con la Fundación Techo, provincia y posteriormente con el municipio de Concordia. Desde entonces, se han llevado a cabo diversas actividades, incluyendo relevamientos, encuestamientos, asignaciones y cuestiones logísticas.
«Equipos de la Fundación han estado llegando a la ciudad cada semana, trabajando en la implementación del proyecto». Después de tres meses de esfuerzo, se logró culminar con éxito la construcción de 131 viviendas en tres barrios de Concordia: José Hernández, 27 de noviembre y La Roca. La entrega de las viviendas se realizó el domingo pasado, a las 7 de la tarde, destacó Rossi.
Este fin de semana, un equipo técnico de 25 personas de la Fundación Techo llegará a la ciudad para realizar una revisión exhaustiva de cada una de las viviendas construidas. El objetivo es asegurarse de que no queden detalles menores por ajustar y garantizar que las viviendas estén en óptimas condiciones.
La semana siguiente, las cooperativas locales contratadas por la Fundación pintarán las viviendas, siempre y cuando el clima lo permita. Durante el fin de semana, también se realizará una última visita para cerrar la etapa de obra inicialmente.
Posteriormente, se iniciarán las etapas de seguimiento y acompañamiento familiar, que incluirán visitas periódicas al barrio para ofrecer apoyo y asistencia a las familias.
El 16 de diciembre, se presentará un informe final al Concejo Deliberante de la Ciudad, donde se detallarán los aspectos técnicos y financieros del proyecto, así como los resultados obtenidos.
Como funcionario público, pero también como miembro de ONG’s como Rotary Club y Crisol, con más de 15 años de experiencia, puedo afirmar que esta experiencia ha sido sumamente enriquecedora. La concreción de comunidad ha sido fundamental, con una participación activa de las familias y la colaboración de más de 500 voluntarios de 13 provincias argentinas y 5 países de América Latina, además de voluntarios locales.
Durante nuestros primeros encuestamientos, realizados hace tres meses, detectamos problemas habitacionales y sociales en el barrio.
Al visitar algunas viviendas durante los encuestamientos, pudimos observar de cerca las condiciones en las que viven las familias y la importancia de abordar estos problemas de manera integral. Esta experiencia nos ha permitido tener una mirada más amplia y comprender la importancia de trabajar en conjunto para mejorar la calidad de vida de las comunidades.
Para ejemplificar Rossi señaló que, «durante nuestros encuestamientos y asignaciones, visitamos varias viviendas y observamos que los pozos estaban construidos de manera precaria y se colmataban fácilmente». Esto significaba que el agua servida de los desagües del baño se esparcía en el patio trasero de las casas, donde los niños jugaban. Sin embargo, gracias a la intervención de cooperativas de trabajo locales, se han construido pozos seguros con cámaras sépticas y conexiones adecuadas.
Esto no solo resuelve un problema ambiental y de salud, sino que también representa un valor agregado para la comunidad. Nuestro enfoque se basa en la teoría de Maslow, que establece que las necesidades humanas se organizan en una pirámide, con las necesidades fisiológicas como la salud, la vivienda y el acceso a la educación en la base. Al abordar estas necesidades básicas, estamos sentando las bases para que las personas puedan avanzar hacia necesidades más altas, como la seguridad, la educación y el desarrollo personal, remarcó.
«Este proyecto representa un salto cualitativo y cuantitativo en la calidad de vida de estas familias». Al solidificar la base de la pirámide de necesidades, estamos creando una plataforma para que puedan seguir creciendo, realizándose, formándose, educándose y siendo cada día un poco más libres y autónomos.
«Queremos agradecer a todos los que han participado en este proyecto». Hemos realizado varias instancias de participación ciudadana, incluyendo recorridas por la obra y reuniones informativas. Seguimos abiertos a quien quiera consultar, participar o involucrarse en este proyecto, invitó el funcionario municipal.
Es importante reconocer que, aunque se ha dado un paso importante, todavía queda mucho por hacer. Debemos ser conscientes de las necesidades que aún existen y trabajar juntos para abordarlas. Estamos comprometidos con seguir trabajando en territorio, conociendo las realidades y buscando soluciones para mejorar la calidad de vida de nuestras comunidades.
En diciembre del año pasado, nos vimos en la necesidad de tomar la construcción del Instituto, siguiendo las indicaciones del intendente Francisco Azcue. En ese momento, nos propusimos trabajar en cuatro grandes avenidas para, el desarrollo del hábitat y la integración socio-urbana de nuestra ciudad. Estas avenidas se centran en el mejoramiento barrial, desarrollo urbano, regularización dominial y relocalización.
Durante el año, hemos podido implementar diferentes actividades y programas en estas áreas, que se han llevado a cabo en toda la ciudad. Por ejemplo, en cuanto al mejoramiento barrial, trabajamos en equipo con la Fundación Techo y también construimos veredas y sendas peatonales en el barrio San Francisco.
En materia de relocalización, tenemos dos grandes programas en marcha. Uno de ellos está en desarrollo y estamos buscando financiamiento y tramitando la documentación necesaria. El otro programa ya está listo para ser implementado y consiste en la construcción de viviendas de bloque de hormigón en el sector del barrio Agua Patito.
El programa está diseñado para apoyar a familias que viven en emergencia socioambiental en la ciudad de Concordia. Se trata de familias que históricamente se han visto afectadas por inundaciones, que viven en viviendas precarias sobre las vías o que enfrentan situaciones de imposible formalización.
La primera etapa del programa está a punto de concluir, con la entrega de las primeras viviendas prevista para fines de enero. Además, hemos trabajado en diferentes estrategias para la regularización dominial, tanto colectivas como individuales, en toda la ciudad. En las últimas semanas, hemos entregado 30 escrituras y pronto entregaremos 40 más.
Es importante destacar que la regularización dominial es un paso fundamental para que las familias puedan acceder a una vivienda digna y segura.
Situación irregular de usurpación de tierras en Pampa Soler
Es un problema que lleva más de 15 años sin resolverse. A pesar de su antigüedad, hemos estado trabajando arduamente para encontrar una solución. Hemos mantenido un diálogo constante con el representante legal de los titulares de las tierras y con representantes de la familias que viven allí.
Recientemente, el secretario de Gobierno, el doctor Luciano del O’lio, se ha involucrado personalmente en el caso y está trabajando para optimizar los detalles y avanzar hacia una resolución del conflicto. Gracias a las conversaciones que hemos mantenido durante el año, hemos podido identificar algunas alternativas que podrían llevar a una solución.
El secretario de Gobierno está en contacto permanente con las partes involucradas y confía en que se pueda encontrar una resolución para este conflicto antes de fin de año. Es importante destacar que la Justicia ha fijado el 16 de diciembre como fecha para ejecutar el desalojo de más de 200 familias en el barrio Pampa Soler.
Avances
Estamos abordando la problemática de diferentes barrios de manera integral, mediante diversas estrategias como condonaciones impositivas, canjes de tierras y aceptación de donaciones. Actualmente, estamos recibiendo la donación de cuatro manzanas en la zona norte de la ciudad, que serán utilizadas para regularización dominial y acceso al suelo urbano.
Además, estamos trabajando junto al diputado López, la diputada Laner y la senadora Espejo para impulsar una ley provincial que exima de impuestos provinciales a los inmuebles donados con fines sociales. Esto facilitará la regularización dominial y beneficiará a las familias con ocupación informal, adelantó.
La regularización dominial es un paso fundamental en este proceso, ya que garantiza el acceso a servicios esenciales y mejora significativamente la calidad de vida de los ciudadanos. Al asegurar la propiedad y el acceso al suelo urbano, las familias pueden disfrutar de una mayor estabilidad y seguridad, lo que a su vez les permite planificar y proyectar su futuro de manera más efectiva, sostuvo Rossi.
En materia de acceso a viviendas, estamos trabajando en colaboración con el Instituto Autárquico de Planeamiento y Vivienda (IAPV) y otros actores clave, como el Banco Hipotecario, para desarrollar soluciones habitacionales para la clase media.
Recientemente, tuvimos la oportunidad de reunirnos con la gerencia nacional del Banco Hipotecario para explorar alternativas y oportunidades que permitan a la clase media acceder a viviendas y suelo urbano de manera más accesible y asequible.
Además, hemos mantenido conversaciones con empresas especializadas en infraestructura de servicios que ofrecen modelos de vivienda innovadores y asequibles, adaptados a las realidades económicas de las familias actuales. Estamos trabajando arduamente para abordar esta necesidad fundamental, que es prioritaria para nuestra comunidad.
Nuestro objetivo es que la clase media sea protagonista de estas políticas y tenga acceso a oportunidades de vivienda y desarrollo urbano que mejoren su calidad de vida, finalizó el titular del InVyTAM.
Fuente: Cadena Entrerriana.
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