En una nueva ofensiva, los demandantes contra la Argentina en el juicio por la expropiación de YPF le pidieron a la jueza de Nueva York Loretta Preska embargar acciones de la compañía.

También solicitaron que la magistrada embargue si es necesario la operación de swap que la Argentina mantiene con China.

El juicio por la expropiación de la petrolera en 2012 continúa en EE.UU. y la jueza de Nueva York reveló cuáles son los bienes que podría embargar para ejecutar la sentencia de US$16.000 millones.

Los demandantes de la Argentina en el juicio por la compra de YPF solicitaron en una audiencia con la jueza Preska embargar distintos activos, entre los que se encuentran acciones de la compañía y hasta el swap con China.

El país tramita en la justicia de Nueva York un juicio que fijó una deuda de US$16.000 millones del Estado argentino, que adquirió las acciones de la petrolera, con Burford Capital, el fondo que compró el derecho a litigar a los accionistas, a los que no se les ofreció el mismo arreglo que a Repsol.

Ahora, frente a la deuda que se generó con los demandantes, le pidieron a Preska una audiencia para que comiencen los embargos de activos argentinos en el mundo, como pasó en su momento con la Fragata Libertad en el juicio con los fondos buitre.

Los activos que pidieron son acciones de YPF expropiadas a Repsol actualmente en Caja de Valores y también otras acciones de la petrolera en manos del Estado.

La jueza debe determinar cuáles de los activos pueden ser embargados para pagar la deuda que el país busca apelar.

Otros de los pedidos de embargo son para cuentas, activos, deudas y transacciones valuados es USD 1 millón o más, el SWAP con China que se activó el año pasado para recomponer reservas del Banco Central y hasta concesiones para la exploración de recursos naturales.

El gobierno presentó el último jueves los documentos ante la cámara de apelaciones para buscar revertir la sentencia que pesa desde el año pasado por la compra de acciones de YPF a Repsol, donde no se les ofreció el mismo trato al resto de los accionistas de la empresa como marcaba el estatuto.

Burford Capital compró los derechos de litigio a estos accionistas y comenzó el juicio en el despacho de Preska para conseguir una sentencia a su favor, algo que logró en 2023 y que ahora el país busca revertir en una instancia judicial superior.

Hasta el momento no se realizaron embargos por la extensión del plazo de apelación que se le otorgó al país por el cambio de Gobierno y porque la Argentina no cooperó con la presentación de información.

Se espera que Preska dé más detalles sobre el caso y comunique cómo seguirá el trámite judicial que puede confirmar la deuda para el país en el caso YPF.